Parece que no te vas a bajar de la nube y te bajas, vaya que te bajas.
Recupero mi blog, tan normal, tan de todo, al fin y al cabo empecé en esto del mundo virtual para reírme y estar en contacto con mi gente y ya me ha dicho Pati que cuando hablo de política no le gustan los comentarios que hace la gente (es maja Pati que no dice que le espantan mis entradas cuando hablan de política).
Tengo pendiente publicar la foto de este periquito como cartel curioso con persona de mi consideración, no tiene persona al lado pero lo doy por bueno por la ilusión que le ha puesto María, una amiga de Jai, y porque por lo menos es un periquito acompañado por si mismo. La letra pequeña dice: perdido el 9 de febrero. Agoporius Rosercollis. Llamar a los teléfonos tal y tal. Se recompensará.
Reconozco que he buscado ese nombre y no da ningún resultado en google, he buscado el nombre científico del periquito y es Melopsittacus undulatus, igual el nombre del cartel es el propio que le puso su dueño que no deja de tener su encanto.
No puedo dejar de comentar el martirio que suponen últimamente las películas del tren talgo Almería Madrid ida o vuelta, la mejor de las cuatro el último bailarín de Mao una especie de Billy Elliot pero en chino, por lo menos entretenida, las otras es mejor olvidarlas, incluida los hombres que miraban fijamente a las cabras os dejo las críticas porque no piensan exactamente lo que yo.
Pongo foto de mi madre conmigo, no sé en que año está hecha, sé que la hizo Quique. Mi madre no sabe en que año estamos pero sabe que quiere que yo esté siempre contenta, con los pies en el suelo no es poco.
Que no me gustan los comentarios chulescos hacia mi marrde, ni a mi familia en general. Recuerda los folios y la seño Mª Dolores!
ResponderEliminarQue maja la abuela y que sabia
Jajaja a la que le dijiste aquello de: pues a mi hermana le tenias que dar otro folio que lo ha roto sin querer, la misma que no te hizo caso y al día siguiente le dejaste claro que al llegar a casa tu padre le había dado a tu hermana todos los folios que había querido. Y eso que la pequeña eras tú.
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