Alguna vez he contado que en mi casa hay costumbre de dormir con la radio puesta, por eso algunas veces oigo cosas que luego no sé si son verdad o las he soñado, otras veces pillo disgustos y de vez en cuando no me puedo creer lo que oigo y preferiría estar dormida.
Ayer nos sorprendió la puesta en libertad de Troitiño, miembro del comando Madrid y condenado por 22 asesinatos, ha cumplido en prisión 24 años de una condena de 2.200. Hasta ahí los jueces se las entiendan, apliquen las leyes como las tengan que aplicar y los fiscales luchen como ministerio público que son, a los políticos les corresponde hacer leyes que la gente corriente pueda comprender y a los españoles de a pie unirnos al dolor de las víctimas.
A lo que iba de la radio, cuando esta mañana he oído hablar a Elena Valenciano, portavoz del comité electoral del psoe, con mucha dureza de la foto de la infamia no he dudado que se refería a la de Troitiño brindando con cava en el balcón de su casa.
¡Que tonta! eso no ha debido llamar su atención, ella se refería a la foto de Rajoy, Acebes, Mayor Oreja y Aznar que han estado juntos en la presentación de un libro que ha escrito Carlos Iturgaiz sobre la enjundia que tiene y ha tenido ser y ejercer como político en el País Vasco. Vivir para ver, cuatro demócratas presentando el libro de un compañero molestan más en el psoe que un asesino pavoneándose de su hazaña.
Al lado de esto es una simpleza que en Singapur diga Zapatero que todos tranquilos que la economía española va como un transatlántico y eso en el 99 aniversario del hundimiento del Titanic. No ha tenido suerte este último con la oportunidad, la portavoz lo que no ha tenido es vergüenza.
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