El domingo fui a ver valor de ley, lo que se dice una película del oeste, con sus méritos y sus deméritos. Impresiona la decisión, el valor, el empuje y la constancia de la niña, que no sé por qué dicen que es fea, Mati Ross, y su extraña alianza con un alguacil borrachuzo y noblote y un ranger de Texas pedante, creído e inoportuno.
Una buena tarde de cine sin pretensiones.
Este fin de semana me voy a dedicar a redecorar este blog, y poner nuevas imágenes y perfiles en facebook y twitter siguiendo las hazañas de mi amiga Carmenomas y los consejos del economista de letras. Nos vemos el lunes o así.
Sorpresa, la palabra redecorar no está en el diccionario, en cambio repintar aparece como volver a pintar y renacer como volver a nacer, no sigo investigando que tampoco hace falta, total que tenemos vocablo nuevo en el nuestro particular, redecorar como volver a decorar, es sencillo pero vale a la espera del comentario del purista obsesionado que frecuenta este blog y algo tendrá que decir.
Tú redecoras y yo te propongo nueva palabra para tus famosos listados periódicos.
ResponderEliminarPichorras: no pintas nada cuando estás como él en Pastriz, localidad cercana a Zaragoza. Obviamente es un dicho de Aragón: "pintas menos que Pichorras en Pastriz". Podría ser un nombre propio y a lo mejor no valer para tus listados.
Para que quede más claro, tiene el mismo sentido que el dicho "pintas menos que la Tomasa en los títeres", que repite actualmente tu madre y que seguramente aprendió de la abuela Andrea. Por tanto este último madrileño o toledano.
¿Qué encargo tan inútil tendría la Tomasa en los títeres? ¿Qué triste función cumpliría Pichorras en Pastriz?
¡¡¡Cuántas veces me identifico con Pichorras o Tomasa¡¡¡
¿Y el de "pintas menos que Pilatos en el Credo"?
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