que metro tan raro

Cuando le pregunté a mi hermano mayor cual era la parada de metro en la que tenía que bajarme para sustituirle en una guardia hospitalaria a la que nos andamos acostumbrando, me dijo que no tenía ni idea, que igual era doctor esquerdo. Comprendí que mi hermano no tenía costumbre de viajar en metro, la verdad es, ahora que lo pienso, que igual mi hermano nunca ha usado el metro, tengo que preguntárselo.

En el metro han pasado algunas cosas, de las más llamativas esa tendencia de las lineas a alargarse por los extremos de manera inagotable y que en muchas de ellas los móviles tienen cobertura. También han puesto, en algunas de las estaciones, ascensor. Claro, uno no va por las escaleras mecánicas dando los buenos días a todos los que se cruza por el camino, ni nunca se saluda al entrar o salir del vagón pero la verdad es que meterse en un ascensor con, como mucho, otras tres personas y no levantar la vista del suelo es un poco descorazonador. No sé:

1.-Si la gente se vuelve rara de mucho coger el metro y por eso mi hermano no lo frecuenta.

2.-Si ya son raros antes de coger el metro y mi hermano no coge el metro porque él es normal.

3.-Si lo normal es coger el metro y no integrarte mucho por si no te gusta la gente y los tienes que ver todos los días a pesar de mi hermano.