Siempre me ha encantado el himno de los esclavos de Nabucco, parece que nos gusta incluso a los que no entendemos nada de opera, vamos esos que en los conciertos esperamos a que el aplauso ande ya en todo su esplendor para empezar a aplaudir por no meter la pata.
Estos días ando pensando en lo poco fanfarrones que somos los españoles en general, quizá seamos demasiado modestos, pero hay una cosa de la que hemos presumido durante treinta años: La transición. Sin duda no era fácil y lo hicimos fácil.
¿No hay nada mejor qué hacer ahora qué cargársela?
Mientras en la opera los esclavos añoran su Patria perdida.
A nuestro lado cerca de cinco millones de parados miran atónitos.
Esa fue la primera opera que vi en mi vida, fue en el auditorio de Almeria, no voy a decir que me aficionara a la opera, pero si que me encanto.
ResponderEliminar(Odio escribir sin acentos, pero de repente la tecla del acento se ha vuelto loco: P.ej. ojal´´a
Lorena
¿Ojál?
ResponderEliminarLa transición la hicimos Carrillo y yo con la oposición del tándem Felipe-Guerra, de la AP de Fraga (que se abstenía en todo lo importante) y del Rey, que estaba acojonao perdido. Ahora a mí se me ha ido la pelota pero tengo momentos de lucidez en que recuerdo la verdad.
ResponderEliminarLo de Lorena es un virus. Busca en Google "el virus del acento doble" y prepárate a morir. Yo conseguí quitarlo tras bajar un programa que en realidad era un espía troyano sucioperro. Finalmente, tuve que acudir al típico amigo informático que lo dejó todo como estaba al principio, pero con mejoras que no necesitaba y unas cuantas peoras notables.
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